sábado, enero 26, 2013

Tabú, de Miguel Gomes

Hoy y ayer, Lisboa y Mozambique, vejez y juventud...

Tabú es una película de contrastes:

áspera y sensual
inmediata y evocadora
cruda y exhuberante

Una parábola, ya desde el ocaso, sobre el paraíso perdido: terrenal y sentimental.

Sobre el paso del tiempo que no todo lo cura. 

Sobre los distintos tipos de colonialismo y sus perdurables consecuencias.

Pero Tabú es ante todo una película compleja que apuesta por el riesgo formal y que triunfa en el empeño.



2 comentarios:

Blue dijo...

Habrá que verla entera. La pinta no es mala.
Saludos.

Anónimo dijo...

Apuntada queda para su visionado.
No, el tiempo no lo cura todo, ni lo borra. Me gustó tu ficha sobre la película,...jeje...le quitarás el puesto a Boyero.
saludos