martes, septiembre 17, 2013

Sin opción

-¿Qué otra cosa podía hacer? Yo soy un hombre normal y corriente. Tengo mujer e hijos y no, no soy ningún héroe... Entonces, como le decía, me obligaron a coger el dinero, señor juez. Me amenazaron con que si no lo aceptaba y lo gastaba debería atenerme a las consecuencias. Y ya soy lo bastante mayorcito como para saber que con esa clase de gente no se juega...

3 comentarios:

nadie dijo...

Conciso, irónico, eficaz, sencillamente fantástico. Mi felicitación y un cordial saludo.

Aurora Boreal dijo...

Ese tipo tiene toda la razón.
¿Qué hace ante un juez?
Lo natural será que salga por la puerta giratoria y le nombren consejero de Repsol, Telefónica o Santander.
Eso para empezar.
With compliments .

larser1 dijo...

Presiento en Il Gatopando dotes para escribir un guón teatral. Las excusas del inculpado ante el juez recuerdan al modo de expresarse de " pícaros " españoles, como un tal Floriano, o cual García Escudero... en fin, hay muchos que se identificarían.
Cuidado con el léxico, si escribes un guión. Hay algunos que les gusta demandar judicialmente por un quítame de allá esas pajas.
Mejor hablemos de NewYork. Con Auster nadie se mete.
Saluti !