Al acercarme hasta la céntrica Gran Vía madrileña el pasado sábado por la tarde, sólo una pregunta todo el rato: ¿Esto es a cuanto hemos sido capaces de llegar tras cinco mil años de civilización?
Gracias, Emma, por tu comentario. No sé, a lo mejor tenías que haber estado tú allí también para comprenderme o, quién sabe, puede que ante las masas desatadas tienda a la misantropía. Quizás ambas cosas a la vez, ¿por qué no? Mi novia -no coincidimos siempre, menos áun en nuestras visiones de la capital pues ella es madrileña y yo no y siempre me echa en cara que soy muy crítico con su ciudad- sintió lo mismo. Así es que en vez de a la Gran Vía ahora me iré a tu blog. A ver qué me depara. Ojalá me sorprenda.
La Gran Vía es una bella metáfora de lo que es la España "cosmopolita", yo le veo encanto, como a muchas cosas. En París o en Bruselas no hay nada parecido. Espero que te haya sorprendido( mi blog) Un saludo.
La Gran Vía no está tan mal, páseate por los campos elíseos. Me gusta tu blog
ResponderEliminarGracias, Emma, por tu comentario. No sé, a lo mejor tenías que haber estado tú allí también para comprenderme o, quién sabe, puede que ante las masas desatadas tienda a la misantropía. Quizás ambas cosas a la vez, ¿por qué no? Mi novia -no coincidimos siempre, menos áun en nuestras visiones de la capital pues ella es madrileña y yo no y siempre me echa en cara que soy muy crítico con su ciudad- sintió lo mismo. Así es que en vez de a la Gran Vía ahora me iré a tu blog. A ver qué me depara. Ojalá me sorprenda.
ResponderEliminarLa Gran Vía es una bella metáfora de lo que es la España "cosmopolita", yo le veo encanto, como a muchas cosas. En París o en Bruselas no hay nada parecido. Espero que te haya sorprendido( mi blog) Un saludo.
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