Yo había comprado mi entrada para ver una obra de mi adorado Bertolt Brecht pero, de pronto, sin avisar, en medio de la función mutó en otra de Pirandello. Al pedir el libro de reclamaciones, se me explicó que el cambio había sido por mi bien, que era una cuestión de responsabilidad.
1 comentario:
Si al menos hubiera mutado en Harold Pinter... Aunque lo mejor hubiera sido que te devolvieran el importe de la entrada para poder cambiar a otro teatro. La reclamación podrás hacerla en la Oficina del Consumidor y la respuesta te llegará dos legislaturas después.O tres.O cuatro.
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