domingo, noviembre 24, 2013

Escritores/as de ayer y de hoy


Antes, uno escribía libros y, poco a poco, si procedía, se hacía famoso.

Hoy, parece ser más bien al revés. Uno primero se hace famoso y a continuación publica libros, a poder ser mostrando su imagen en la cubierta




Otra práctica, por cierto, importada de los Estados Unidos.

4 comentarios:

Boris dijo...

Sí,razón tienes.
Y lo malo no es que se publiquen, sino que haya quien los compre, sin mirar el precio.
Y entre esos " famosos" hay un montón de políticos en este momento
intentando vendernos sus memorias sin un ápice de pudor, sentido del ridículo ni nada que se le parezca.
Al menos, habrá unos "negros" que se habrán sacado unos eurillos. Es un consuelo.



Il Gatopando dijo...

Hola, Boris: he pensado también en incluir los de los políticos aunque al final los he dejado fuera.
Es legión asimismo la gente procedente del cine que opta también por hacerse un hueco en la literatura: Fernando León de Aranoa, Manuel Gutiérrez Aragón, Elías Yanes, David Trueba... Al dar el paso tienen la publicidad garantizada.
Luego está el gremio de los restauradores, y últimamente también el de los deportistas...

Y sin embargo, ¿a qué nadie tiene interés en ver a Vila_Matas jugando al fútbol, o en comerse una fabada preparada por Vargas Llosa, o en escuchar a Javier Marías desmenuzando las relaciones entre los concursantes de Gran Hermano?

Rafa él dijo...

Vivimos en un mundo cada vez m´ñas esperpéntico, donde todo parece tener cabida. Como dice Boris, la pena es que haya gente que realmente compre eso que ellos llaman libro.

En el tema de políticos (o como menciona, de famosos cineastas), es doblemente esperpéntico, pues sepan o no escribir, el libro lo ponen en la calle con sólo figurar su nombre.
En ésto como todo en la vida, es coger el mando con tacto y suavidad, sin que se caiga al suelo, y "poner" el programa (Libro, Película, Pintura, Música...)que tú consideres realmente bueno...

Raroabrazo.

Blue dijo...

Dicen que lo importante es leer, pero si es así, también vale con leer Hola ¿no?

Saludos.